Como ya muchos de Vds. sabrán, se celebró hace unos días el II Congreso del Libro Electrónico en la ciudad de Barbastro (Huesca).
Los que no estuvimos presentes poco hemos podido saber de lo que allí aconteció. Así, de momento, el único que se ha lanzado a escribir sobre el tema es Bernat Ruíz Doménech, quien nos ha dejado escrito en su blog sus impresiones sobre la decepcionante conferencia de Luis Magrinyà (Alba Editorial), Claudio López de Lamadrid (Penguin Random House) y Paula Canal (Anagrama). Decepcionante arranque del que ya se hizo eco Paula Corroto en Eldiario.es, en un artículo titulado II Congreso del Libro Electrónico: ¿Salvarán las bibiotecas al e-book?». Desde las trincheras oficiales del congreso, el periodista Darío Pescador saca algunas conclusiones, aquí (una de ellas es la que encabeza este post, pues que «la mejor forma de fomentar la piratería es poner trabas a la lectura»).
Sin embargo, la suerte que tenemos los que no pudimos acudir a la cita es que hay un catálogo completo de vídeos de lo allí acontecido sobre el escenario, aquí, así como también de entrevistas a algunos de los participantes y organizadores, aquí.
Así que felizmente vamos a poder ver por nosotros mismos lo sucedido y sacar nuestras propias conclusiones.
En fin, pónganse cómodos y dénle al play, pues hay horas y horas de mesas redondas por ver, escuchar y asimilar.
es autor del libro de relatos Fin de fiestas (Suburbano, 2014), además de crítico literario y miembro de la AECL (Asociación Española de Críticos Literarios). Escribe sobre arte y cultura para diferentes medios impresos y digitales. Forma parte del equipo editorial de Hermano Cerdo.
Por cierto, que el asunto del congreso está trayendo cola.
Pueden seguir la disputa entre Bernat Ruíz Doménech y Luis Magrinyà aquí:
http://scriptaverba.wordpress.com/2014/11/05/congreso-del-libro-electronico-o-convencion-de-ventas/
Saludos
J.S. de Montfort