Cuenta el perodista Manuel Jabois en un artículo reciente del periódico El País que el verdadero nombre de Francisco Umbral era Francisco Alejandro Pérez Martínez. Siendo estos dos últimos apellidos los de su madre quien, según parece, hubo de tener un idilio en su juventud con Alejandro Urrutia, un hombre casado entonces y padre -también- del poeta Leopoldo de Luis y que moriría en los años cincuenta.
Lo curioso del caso es que Leopoldo de Luis y Umbral fueron amigos, pero sin que quedase claro entre ellos que eran, también, hermanos.
Para volver sobre Umbral (siempre hay que volver a Umbral), Jabois ha entrevistado a Jorge Urrutia, el nieto del padre de Umbral, quien le cuenta que, al saber la noticia, animó a su padre, al poeta Leopoldo de Luis, a que hablase con él, con Umbral, a lo que este respondió que «si Umbral no había querido contarle nunca la verdad, era absurdo desenterrarla ahora».
Leopoldo de Luis murió un año después de saber la noticia. Y Umbral dos años después.
Jabois glosa así al personaje:
«El escritor fue el resultado de dos heridas: la ausencia del padre y la ausencia del hijo. Hubo una tercera, voluntaria, que consistió en su propia disolución. él. Y siempre aparece en sus dos vertientes más queridas: la de padre y la de hijo. Personalidades que esconden, ambas, una grave tragedia. Pero no hubo en su literatura hueco para su propio padre, hecho que quedó siempre soslayado».
es autor del libro de relatos Fin de fiestas (Suburbano, 2014), además de crítico literario y miembro de la AECL (Asociación Española de Críticos Literarios). Escribe sobre arte y cultura para diferentes medios impresos y digitales. Forma parte del equipo editorial de Hermano Cerdo.
Leopoldo era una persona fina de espíritu, solo así se explica que no quisiera sacar la conversación y hacer sincerarse a Umbral. Vaya por delante mis elogios igualmente a -Umbral, que sabiendose preterido por el hijo legítimo, siempre mantivo una actitud positiva hacia de Luis, siendo ambos muy a menudo miembros de mesas redondas en común. Mostró también Umbral reconocimiento hacia el hijo de Leopoldo,J Urrutia. Cuando uno toca la tristeza, el abandono y la ilegalidad debe de ser muy buena persona para perdonar o simplemente para no envidiar. Creo que la noticia engrandece a ambos.
Es muy bello eso que dices Charo. Y, en efecto, cree uno que eran dos seres nobles.
Un abrazo
J.S. de Montfort
La biógrafa de Umbral, Anna Caballé, contesta el articulo de Jabois y reconoce que le habían insinuado que Leopoldo de luis y Umbral podían ser hermanos, pero que se trata de un dato que ella no consiguió verificar y confiesa -lo que le honra- su incapacidad de haber sabido mirar en el lugar adecuado para verificar dicha sospecha.
http://cultura.elpais.com/cultura/2015/03/03/actualidad/1425402258_118302.h